Las plantas solares están cada vez más extendidas, y tanto empresas como particulares son conscientes de los beneficios que aporta la central solar en todos los ámbitos. Las posibilidades de la energía fotovoltaica son infinitas. También la ingeniería se está desarrollando en el sector de la energía eólica como otra de las fuentes energéticas limpias preferidas y más versátiles. Pero no solo para abastecer edificios o vehículos se debe tener en cuenta el medio ambiente, sino que también a la hora de jugar y de regalar juguetes se puede ser ecológicos. Estos son algunos de los juguetes más sostenibles.
Juguetes de cartón
Parece frágil pero no lo es. Con cartón pueden fabricarse juegos y juguetes variados. Por ejemplo, los juegos de mesa. También sirve para elaborar casas de muñecas. Y, por supuesto, libros de papel o cartón reciclado.
Juguetes de madera
Las posibilidades de la madera son infinitas para la diversión. Es posible encontrar puzles, construcciones, dominós y otros juegos de mesa, casas de muñecas, triciclos y cochecitos, cocinitas, muñecas, bicicletas y muchos accesorios. Para mayor cuidado, hay que asegurarse de que se está comprando un juguete hecho con madera ecológica.
Juguetes de tela
Son ideales para los niños más pequeños o para las mascotas. Son suaves y cómodos, y raras veces son peligrosos, salvo que tengan accesorios y objetos añadidos, como botones. Pero aquí también hay que tomar ciertas precauciones, como son que el juguete esté hecho de algodón ecológico con relleno natural. También son una opción los juguetes de fieltro de lana. Por el contrario, hay que evitar aquellos que hayan sido confeccionados con telas provenientes del petróleo o que lleven pinturas y tintes peligrosos.
Otra alternativa, aunque debe dejarse como última opción, son los juguetes de plástico reciclado. Sin olvidar que, pese a ser reciclado, el plástico es un contaminante. En definitiva, la ingeniería ecológica llega a los juguetes.